Seis pasos proactivos para arreglar un conflicto

Seis pasos proactivos para arreglar un conflicto

Los problemas se presentan siempre y en distintos grados, equipemos a nuestros hijos para enfrentarlos, su vida fluirá de manera más tranquila relajada y en armonía. La mejor forma de enseñar es con el ejemplo. Apliquemos estos simples pasos al resolver nuestros problemas con nuestros hijos y detallemos con ellos cada punto después de aplicarlos para que lo relacionen con la situación que se vivió. Y así, ellos estarán equipados para aplicarlos con el resto de sus relaciones.

  1. Lo cortés no quita lo valiente. Siempre digan lo que sienten, hablen de ustedes, de lo que les pasa y están experimentando, sean claros.
  2. El valiente y sabio va por delante. Eviten el “Me hiciste o me dijiste” y cámbienlo por “Me pasa esto o “me sentí de esta forma” Expresarse desde su ser ayuda a que el otro se abra.
  3. Observen su historia personal. Se trata de que detecten cuáles son los enfrentamientos recurrentes y si pelean por lo mismo tendrán que analizarlo para saber que hay debajo.
  4. Gánense el derecho a ser escuchados. Eso lo logran siendo mas asertivos y no enfrentándolo todo con reclamos y ofensas
  5. Hagan un corte diario de caja. ¿Cuántas trabas tuvieron? Y de esas, ¿en cuáles lograron construir o acordar algo y qué detonó que terminaran fatal? Todos cuentan: los que tengan en la calle, en el trabajo o en casa.
  6. En un apuro los dos pueden ganar. Platiquen y escuchen, abran su mente a lo que el otro tiene que decirles y quítenle la importancia a tener o no la razón.
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