Los científicos han descubierto un vínculo entre las habilidades motoras y el desarrollo de las habilidades cognitivas. Los niños pequeños con habilidades motoras más desarrolladas les va mejor en la escuela que los niños que no reciben tanta estimulación física. Con esto en mente, ¿qué deben saber los padres sobre la estimulación de las habilidades motoras de sus hijos?
1) Inicia lo más pronto posible con el desarrollo de habilidades motoras, desde los 4 meses pueden empezar.
El cerebro se desarrolla alineado a los periodos de tiempo durante el cual los niños son más receptivos a aprender ciertas habilidades. Por ejemplo, la ventana para el aprendizaje de habilidades motoras finas termina alrededor de los 10 años, una vez que este periodo termina, todavía es posible para tu hijo a adquirir estas habilidades, pero será más difícil.
2) Repetir, repetir, repetir …
Al igual que el alfabeto y las tablas de multiplicación, las habilidades motoras se aprenden mejor a través de la repetición guiada. La repetición le da a un niño más oportunidades de experimentar el éxito, crear confianza y desarrollar fuerza y resistencia. Los niños pequeños, por ejemplo pueden obsesionarse con una habilidad en particular, con ganas de repetirlo una y otra vez. Si sucede, ¡hay que dejarlos! Es una gran manera de internalizar las habilidades y el desarrollo de su memoria muscular.
3) Retar constantemente las habilidades motoras de tu hijo.
Dicho esto, también es crucial el retar a tu hijo y ofrecer nuevas experiencias. Recuerda, hacerlo sin tener expectativas: tú puedes estar listo para algo nuevo, tu niño puede que no.
Cuanto más los padres prediquen con el ejemplo en la toma de riesgos pequeños, es más probable que el niño lo haga. Demostrar la habilidad física, crear emoción, una motivación positiva, probablemente tu hijo querrá tratar. Si tu hijo no quiere hacer algo, eso también está bien, siempre y cuando mantengamos la ventana abierta para que pueda cambiar de opinión e intentarlo.
4) El desarrollo de la formación habilidades motoras ≠ para los Juegos Olímpicos.
Asegúrate siempre que lo principal sea el bienestar de tu hijo en todas las actividades que participe. No se busca ganar las olimpiadas, estás tratando de mantener a tu hijo motivado y ayudarlo a alcanzar los puntos clave del desarrollo. Las actividades deben ser divertidas y positivas, fomentando gusto por la actividad física que va a durar toda la vida de tu hijo.
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